jueves, 19 de septiembre de 2019

Estilo formal, coloquial y vulgar

Aparte de los estilos formal e informal de la lengua, de los que hemos visto sus diferencias y características, la variedad de las situaciones comunicativas a las que nos enfrentamos los hablantes nos exigirá modificar en uso del lenguaje en distintos tipos de "hablas".

Un hablante culto, con conocimientos de la lengua, podrá expresarse en distintos tipos de "hablas" dependiendo de la situación. Sin embargo, una persona sin cultura ni formación tendría más difícil hacer eso. Añadimos en estos casos el nivel vulgar, que no hay que confundir con el coloquial. 


Las incorrecciones de tipo fonético, morfosintáctico y léxico, propias del nivel vulgar de la lengua, reciben el nombre de vulgarismos.

Ejercicios:

1. Identifica y explica los vulgarismos que hay en las siguientes oraciones.

Pienso de que como sigas así te se va a poner cara de méndigo.
 ¿Fregastes los cacharros? 
 Nunca la devolví las cartas de amor que me había escrito.
 El istituto estaba a media hora del pueblo. 
 Lo veo de venir: este año no nos suben el sueldo.
 En una familia que entran dos sueldos nornales se puede vivir. 
 Me se antoja dar un paseo en coche.
 Te aseguro que todo es un problema de monis. 
 Cuando salgas, traime el periódico. 
 Todo el mundo, cuando se muere, lo entierran. 
 Si sería verano, iríamos a Santander. 
 Ha venío un señor a preguntar por tí. 
 Me dijeron de que hacía mal en dejar el trabajo.
 Resulta difícil soportar los carácteres fuertes.
 Esmayao es lo que estoy, de tanto trabajar.
 La visita de sus tíos ha transtornado sus planes.
 Ha cumplido en Octubre ventidós años.
 Sé que se lo devolvistes el bolígrafo a Juan.
 Habrán muchas gentes en la feria. Y contra más  haigan, más mejor me lo pasaré.

2. Escribe el siguiente texto en un estilo más coloquial. Puedes usar incluso algún vulgarismo que se te ocurra. 
Estimado don Carlos, qué gusto verlo. Permítame decirle que recibí su informe sobre el efecto de la contaminación en los lagos localizados en el sur de Chile y, aunque sus resultados no son alentadores, me parece una formulación sorprendentemente acertada.

3. Ahora al revés, transforma el texto de abajo en otro de estilo formal.
Pos aunque no tenía encasi niun rial desos cachocartones pal viaje ni na, me subí al camioneta. Aluego questaba drento del carromato queicen en la capital autobús, tuavía pude ir sentao ytó aunque to repretao, medio ringao y to tieso. Pos tuve de pagar y con pacencia me pongoservar al personal cabía alredor...

El origen de las palabras

Repasamos en un par de gráficos cómo se ha formado el léxico del castellano o español:



Y en estas otras imágenes recordamos otros ejemplos de préstamos y extranjerismos que usamos en español: